La única juez de mi mundo interno.

Siempre seguí un sendero de espera eterna, de paciencia nata. En mis aventuras recite una serie de reglas auto-impuestas, donde todo debía ser analizado el tiempo suficiente, sin excepciones. 

Nunca supe porque esa razón de ser. Tal vez era una excusa para tomar el valor que hacia falta en ese terreno, o en todo caso fui (y soy) poseedora de una mente demasiado analítica en algunos asuntos. De todas formas y aunque suene tan triste, todo esto me sirvió para nunca perderme en aquellos bosques que no conducen a ninguna parte.

Siempre pensé que seria así.

Quien diría que me iba a equivocar. 

3/4

Tres cuartos de vida tratando de entender.
Tres cuartos de vida dando explicaciones.
Si nadie entiende ¿importa acaso?
Si nadie pretende entender ¿por que preocuparse?

Un cuarto de vida tratando de ser feliz.

Cuartos vacíos.

Se despertó una semana después de que las luces se habían apagado. Como si tanta oscuridad la hubiera sometido a dejar su mente en blanco, por mas contradictorio que sonara.
Todo comenzó el día que decidió aceptar que un cuarto vació no era un mal lugar para que sus ideas reposaran. Armo una valija llena de valor para dejar atrás todo eso que lentamente le estaba congelando el alma, y luego de unas largas semanas carentes de sueño pudo tomarse aquel tren que pensó que nunca llegaría. Justo en el momento exacto que se encontraba programado dicho apagón.
Y en sus pensamientos previos a los hechos ella pensó que largas tormentas iban a inundar su nuevo hogar.

Que tonta idea.
Pues nunca llovió.
Ni una sola gota.

Se despertó una semana después de que las luces se habían apagado y supo, que había tomado la decisión correcta.

Don't be hard on yourself

Su peor critica es ella. Por supuesto.

No seas tan dura con vos, nadie nunca dijo y ella tampoco se atrevió a pensarlo. 

Nunca se permitió descansar ante la idea de soñar despierta y reflexionar sobre su propio comportamiento. De todas formas, si ella no se plantea ciertos asuntos, nadie mas lo va a hacer. 

Porque al final  si ella le falla a una persona que quiere, siente que se falla en parte a si misma. Un ego herido, un pensamiento egoísta que en algún punto no lo es tanto.

Y si, suena tan confuso que casi carece de sentido. Sin embargo las cosas siempre son así, y siempre lo serán. 

Admitir que estamos equivocados es algo que todos deberíamos hacer cuando realmente lo estamos. 

Vueltas.

¿Seré yo la que este errada?
¿Sera alguna especie de karma cósmico por las cosas que alguna vez hice mal?
¿Sera que soy demasiado ingenua para querer ver las cosas como son?
Todo aquello que consideraba que se incluía en una especie de lista imaginaria sobre el sentido común, aquello que en mi juicio me parecía que la gente debería dar por sentado, respecto a como actuar en diferentes situaciones mas allá de las individualidades que nos hacen las personas que somos. Todo parece una mentira que alguna vez sonó demasiado bien en mi cabeza.
Y ante tanta ingenuidad, tanta ceguera infligida, tanto corazón y tiempo desperdiciado, se me desgasta el alma.
Estoy agotada.
Cansada, de no aprender.
Yo necesito a la gente.

Es increíble como no me falla la intuición.

Melancolía

El problema de extrañar determinadas situaciones es no volverán a ser iguales.

El problema de extrañar a ciertas personas es que tal vez ellas no te extrañan en lo absoluto.

Y si te levantas hoy pensando en lo agradecida que estas por tu presente. 

¿Por que te permitís quejarte internamente ante ciertas faltas de la vida?

He de suponer que no podemos tenerlo todo. 

Paz

He bebido el agua del mas dulce rio y me he quedado dormida en su remanso.
¿Que ha pasado con mi año?
Parece que los meses viajan rapido con la corriente y ya atras quedo aquel invierno despiadado, pues puedo sentir al verano acariciando mis ideas y abrazandome en las noches.
De pronto carezco de aquella urgencia de ver las hojas del otoño caer.
Espero poder beber de el por mucho tiempo mas.

Y no desperdiciar ni un solo segundo. 

Espera lo inesperado, y cuando el mundo gire mas rápido de lo que podes aguantar, tal vez te encuentres con que no sos la única mareada al respecto.
Pero incluso entre pasos pocos firmes y ritmos alternos, tal vez puedas bailar entre algunos obstáculos.
Descansar un rato en un rincón solitario.
Levantarte cuando alguien te extienda la mano.
Nunca estuve tan segura de estar segura sobre algo.

Le petit prince

"Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde, ya desde las tres comenzaré a estar feliz."

El tiempo la nada es para aquellos que no precisan esperar.

La niña del rincón.

Sigue siendo la reina de la ingenuidad, de la ceguera auto infligida. 

El no ver para no creer y sin embargo seguir sintiendo las cosas de la misma forma.

Pero incluso cuando se aleja de todo, en la distancia divisa las sonrisas de aquellos que supieron llegar a su corazón. 

Entre tantas sombras, algunos fantasmas brillan por permitirse sentir.

Y el observarlos de esa forma nunca dejara de llenarla de dicha. 

Oh no, my feelings are more important than yours.

Intentamos con todo nuestro ímpetu ser duros e indiferentes, impermeables ante todo lo que nos enfrente. Nos encanta esa idea de fuerza, de tirar la cuerda y no ceder. Jugamos el juego, hacemos las apuestas, sin miedo a las consecuencias.
Nos fascina la idea de ganar. Nos reímos de nuestra viveza.
Sin embargo todos caemos igual ante la ilusión de sentir. Casi de la misma manera imperceptible. Lentamente enredados en nuestros pensamientos, entrelazando nuestras expectativas, tejiendo nuestras realidades, solo para concluir exhibiéndolas a aquellos que se han ganado el derecho de presenciarlas.
Nos encanta auto convencernos de que somos los mejores en ello... y bueno, tal vez a veces nos merecemos creerlo por un rato. Es lindo sentirse invencible, incluso cuando eso esconde el sentirse vulnerable.
Somos tan básicos.

Plegaria

El reloj de arena vuelve a correr, y con cada segundo cada granito de arena hace su aporte, pues esta empezando a pesar, cada vez mas, cada día mas.
Ya he comenzado a pedir por favor que nadie se atreva a darlo vuelta.

Bittersweet

Cierro los ojos y todo lo observo,  todo lo siento, como si de ayer se tratara. He nacido con el don de la memoria, y se que ustedes deben creer que es bastante gratificante, pero nunca estuvieron mas desacertados.
Desde el día en que pude hacer uso de la razón, recuerdo, cada palabra y su filo, cada mirada y su significado, cada golpe y su marca. Cada rostro, de aquellos que tanto bien me hicieron, pero que un día partieron sin decir adiós. Cada rostro de aquellos que aun se mantienen a mi lado. Cada recuerdo guardado muy dentro, donde la sangre baila a un ritmo natural, y los pensamientos no interfieren en aquel ritual. Bueno, tal vez lo aceleran a veces.
El lado bueno de la vida, el sentir, el vivir, el pensar, el rememorar, el sonreír, el querer, el amar.
El nunca olvidarse, de nada, ni de nadie.
Que condena tan agridulce.

El viejo fuego.

Abrió su boca de gélido aliento, y comenzó a recitar sus oraciones una vez mas. Se ubico al lado del fuego, para que este lo consumiera por dentro, lentamente, pero de forma pareja. En sus manos sostenía una bebida que parecía enfriarlo mas de lo que ya se encontraba.

Empezó a escribir sobre épocas doradas, donde los nombres solo eran eso, nombres vacíos que alguna vez iluminaron su alma; participes de anécdotas tan insignificantes como su propia existencia. Y trato de recordar cuando fue la ultima vez que cerro una puerta, pero no lo logro. 

¿Por que de alguna forma siempre terminamos siendo solo nombres en algún recuerdo?. No pudo responder a tal incógnita, pues el calor ya había hecho su trabajo. 

Y el también se convirtió en un nombre vació.