26 de agosto de 2018

Empatia

Dicen que el mundo nunca volverá a ser tan bello y yo les digo que siempre lo fue.
Lo siento así en la forma en la que el sol se escurre entre las hojas de los arboles o cuando el amanecer colorido te acompaña en tu camino matutino, en ese abrazo tan esperado, en el primer sorbo de mate después de un día largo, en el sentimiento de plenitud que queda luego de aprender algo nuevo y muchas otras cosas que podría enumerarles.
A mi siempre me parecieron bellas esas escenas pero no quitan que el resto de las cosas se encuentren en conflicto, porque simplemente no pesan lo suficiente. Antes en la juventud, en la inocencia, me nutría de ellas, sin embargo hoy encuentro otra carga en mis espaldas y aquellos lugares a los que alguna vez recurrí como escondite ahora son pruebas mas de lo que esta sucediendo a nivel social.
Supongo que ya es demasiado tarde para escapar, entonces, no puedo evitar pensar que yo pude ser ese nene que avergonzado me dijo que no quería nada porque no le alcanzaba la plata cuando lo atendí el otro día. Que soy aquel chico que dejo los estudios porque no podía sostener vivir en la ciudad donde se encuentra la carrera o aquella persona que despidieron de su trabajo con el cual mantenía a su familia . Tal vez incluso algún día seré aquella jubilaba que no puede pagarse los medicamentos.
Aunque aparenta ese "yo" convertir todo esto en algo egoísta, es una muestra de que soy igual a todos y a cada uno de ellos... y es indispensable pensar que el mundo deba estar, mas que bello, bien para ellos y para mi.
Incluso aunque ello conlleve convivir con un sentimiento de desesperanza constante, que no muchos están dispuestos a tener de acompañante en sus vidas.

4 de agosto de 2018

Todo es tan blanco o negro estos días que comienzo a extrañar la presencia de color.
La carencia de una complexión compleja nos convierte en bases vacías.
Quiero que mi mente nunca se cierre a nuevas promesas, a nuevas propuestas.
Quiero a su vez sin embargo no perder el desencanto y que el odio nunca empañe mi corazón.