30 de noviembre de 2019

Sorry

La libertad no puede falsificarse y no hay firma que avale la particular elección de palabras hirientes, sin importar el trasfondo de frustración que acarrean estas.
Hay algo curioso en enunciar afirmaciones extrañas. Como repetir algo hasta el hartazgo y que pierda sentido.
Suerte que tengo un ejercito de gente a mi lado siempre dispuesta a conectar con sus sentimientos, apoyar al otro y con la capacidad de reírse de ellos mismo o no tomarse seriamente, todo el tiempo.

Somos demasiado jóvenes para pensar que nuestros mejores años quedaron atrás.
Lo mejor esta por venir, siempre.



29 de noviembre de 2019

Escalofrío

El motivarse por aquella influencia
de la intuición, premonitorio rasgo
de lo personal, es difícil contrariar
a la elocuencia de varias emociones
exclusivas del vivir con una pasión
exudando un ritmo, único, anímico
nictofilia de noctámbulos perdidos
que observan cada mínimo detalle
irreverente, delirante, apabullante
saboreando la creencia o la verdad
oculta en el misterio de lo subjetivo
¿quien se lleva la mirada intrínseca
a recovecos retirados sin inocencia?










Sed

El curso de una rima nunca desespera
sobresale en la espera de una palabra
que se destaca por ser precisa, afilada
y a veces repetitiva pero interesante
en su constancia rítmica,
no puedo dejarla ir
porque hay una sana obligación
que se materializa en el verso
que la acompaña, siempre

Escribo para no sentirme sola
Escribo para que no te sientas solo
Escribo para calmar la sed de conectar
conmigo y con otros

18 de noviembre de 2019

El clima perfecto

Recuerdo el rechazo al calor creciente durante estas épocas primaverales. Jornada tras jornada, siempre a la espera de una lluvia que refresque y se lleve con ella la tristeza y la nostalgia, así por arte de magia. Estados de inocencia con sabor a viejo.
¿Por qué tenemos la tendencia de anticiparnos a lo pueda suceder?
Como pensar que ciertos sucesos tienen la capacidad de estrujarnos el corazón y al final estos no significan absolutamente nada. Sin embargo esto no indica bajo ningún concepto que estemos construyendo barreras innecesarias para alejarnos de todo mal. Supongo que sentir es más arbitrario de lo que uno pueda imaginar, sobre todo cuando las cirscunstancias cambian con cada nuevo segundo, nunca igual al que fue, nunca igual al que será.
Si, somos precavidos. No puedo negarlo. Nos atenemos a ciertas elecciones porque comprendemos que en el fondo existe la posibilidad del dolor, el cual nunca se caracteriza por ser grato. Sin embargo, no puedo dejar de pensar que estos previos meses me encontré tratando de evitar mis nuevas formas. Estudiando meticulosamente el pasado con el fin de hallar respuestas y al final solo me convencí de que estas novedosas maneras de aproximarse al mundo eran un completo desastre. Que tonta, tonta, tonta. 
Es la inercia del rechazo al cambio, del rechazo al calor, de la espera de una lluvia que vino y partió tan rápido como el sol determinó asomarse nuevamente. Pero yo ya no puedo esperar que las cirscunstancias sean siempre perfectas, porque nunca lo son. Menos puedo desperdiciar la capacidad de imponerme ante todo mal y levantarme otra vez sabiendo que mañana un día traerá seres increíbles a mi lado, canciones que me lleguen al alma, memorias que perduraran y por sobre todo lo anterior; la posibilidad de cumplir con todos mis sueños.

Debe ser muy aburrido nunca preguntarse absolutamente nada.

9 de noviembre de 2019

Mercurio

Nostalgia de noviembre
que invade lentamente
curando previos corazones
consquistado atardeceres
solitarios, pero hay algo
sobre la calma serena
que dictamina sentencias
posteriores, encausadas
en momentos simples
bailando bajo estrellas
observando planetas
movimientos extraños
para cuerpos aislados
preparados para seguir
siempre en dirección
al futuro cercano

Walk with me

Si pierdo mi tren de pensamientos, siempre recuerdo que quedarme en la estación esperando no sirve de nada. 
Por eso camino a todos lados y siempre llego a donde tengo que estar.

7 de noviembre de 2019

Pretender

Si desecho de mi mente ideas inconclusas
ahogando el hecho de lo no dicho
¿por qué sueño lo que sueño?
cuál vestigio obsoleto y perdido
del caos del encuentro
de lo que no quiero ni necesito

se que el futuro distante me permitirá
valerme de lo adquirido, durante este 
tiempo abundante, rico en aromas
excitantes de flores que florecen
aún en ecosistemas adversos

si se con certeza donde deposito
mi sentir, no tengo que prevenir
dolores de cabeza ante ausencias
espontáneas, como esporádicos
reflejos de proyecciones innecesarias
ante la constante carencia que no rima
ni fluye, ni baila en ningún momento

con lo que fui, soy y seré eventualmente
con las capacidades que me protegen
el siempre hacer lo que uno desea
el siempre expresar sus sentimientos
el siempre vivir bajo los propios conceptos
la constante busqueda de mí, la importante
naturalidad de nunca pretender, lo contrario.


4 de noviembre de 2019

Yo escribo, tú escribes, él...


Sobre signos, estaciones y confusiones
confesiones de sábanas adversas
fuegos que frios queman, bellos rostros,
corazones rotos, niños caprichosos
sobre conexiones efimeras que enseñan
dejando tanto sin darse cuenta
sin nunca saberlo con certeza
lo que sucedió y lo que pudo ser
futuro, pasado y presente mezclado
sobre introspección y descontento
ella, vos, él y yo principalmente
sin rozar el ego, solo sincerarme
conmigo en la redundancia de mi sentir
para decir todo aquello que mi cobardía
y mi prudencia me impiden

3 de noviembre de 2019

Divagando

Si miro en retrospectiva no marcho en reversa. No marcho a consciencia, no retrocedo ni dos pasos más.
A veces me cuesta porque me tomo mi tiempo para llegar a algún lugar y cuando estoy ahí mi mente divaga con la idea de nuevas ubicaciones espontaneas. Pero hay algo de sabroso en el camino, de la compañia certera, la vista preciosamente mundana y la canción exacta para el momento exacto. Hay tanta magia desparramada por ahí que me cuesta afirmar que toda la maldad del mundo pueda ganar esta guerra, incluso la maldad de mi cabeza.
Las mejores decisiones de mi vida fueron aquellas que implicaron despegarme de aquellas toxinas perfumadas. Como canto de sirenas a un Odiseo atado, hay cierta tendencia que nos encuentra en la carencia y nos desgarra el alma en pedazos. Es romper con el ciclo y bailar de dicha hasta que la noche se transforme en día, lo que aleja la desgracia. Fácil no es pero tampoco aburrido.
Ay ay ay, no se y no saber no me despera. Será porque no espero nada y se que al final todo siempre llega en el momento justo.

El mejor regalo es quererme mucho más de lo que ayer me quería.