aguardando el momento preciso
para espantar todos estos miedos.
Para decir la relevancia que posee
tu figura, cada vez que la observo
timidamente, trasmitiendo paz
con su tranquila y calida existencia.
Eliminando cualquier emergencia
momentanea, robando suspiros
con o sin consciencia, coloreando
mi paciencia y provocando
de manera efectiva y simple
que otra sonrisa escape
de mis labios.
El amanecer también puede ser
el final de un día, si me relagás
otro atardecer la distancia se afina.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario