que todo lo observa con ojos inocentes
como si esa mirada tuviera más fuerza
que esta otra que la ve con templanza
Si me quemo en la añoranza del olvido
cuando repito que perdí sensibilidad
me ahogo en mentiras que no son verdad
En discursos recurrentes de que los años
equivalen a la perdida de las emociones
cuando hay ciertas sensaciones, esencias
y virtudes que no pueden arrancarnos
del alma por más que así lo promulguen
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